martes, 23 de octubre de 2012

Un Socialismo siglo XXI con más de 100 años de existencia


El socialismo del siglo XXI es un concepto que aparece en la escena mundial en 1996, a través del sociólogo y analista político alemán Heinz Dieterich. El término adquirió difusión mundial a partir de que el presidente Hugo Chávez lo mencionara durante un discurso en el V Foro Social Mundial, el 30 de enero de 2005.

Según su obra Socialismo del Siglo XXI,  Dieterich determina un modelo de Estado que se inspira en la filosofía y la economía marxista, y que se sustenta sobre cuatro pilares: el desarrollismo democrático regional, la economía de equivalencias, la democracia participativa y las organizaciones de base. 

Dieterich descubrió la aplicación práctica de sus teorías en la Venezuela chavista, gobierno del que fue asesor hasta 2007, momento en que cayó en desgracia para el régimen. A pesar de que varios gobiernos latinoamericanos mantienen como definición ideológica el socialismo del siglo XXI, tanto para bien como para mal, todos ellos han hecho renuncia de la mayoría de las tesis teóricas esbozadas por el pensador alemán.

A mediados del 2006, el presidente Chávez expresaba públicamente: «Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad». Y con notable indefinición sobre su hoja de ruta proseguía: «debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día».

Más tarde, el 8 de enero de 2007, Chávez le diría a la jerarquía eclesiástica venezolana durante el acto de juramentación de una recomposición de su gabinete: “Les recomiendo a los obispos que lean a Marx, a Lenin, que vayan a buscar la Biblia para que vean el socialismo en sus líneas, en el viejo y nuevo testamento, en el sermón de la montaña”. Este mismo día Chávez se definió también como trotskista e identificó al socialismo del siglo XXI como una doctrina que posee elementos ideológicos tan variados como el marxismo-leninismo, el trotskismo y el socialismo cristiano.

Para Chávez, el primer elemento sobre el que se articula el socialismo del siglo XXI es su vinculación con la práctica política que tuvo sus orígenes en la década de los 80 con el diseño de lo que vinieron a llamar el “árbol de las tres raíces”: raíz bolivariana –planteamiento afrancesado sobre la igualdad y la libertad, combinado con la visión regional de integración latinoamericana-; raíz zamorana –basada sobre la figura de Ezequiel Zamora, espíritu romántico de los liberales de su tiempo y combinado con fuerte reivindicación de reforma agraria-; y raíz robinsoniana –basada en la figura de Simón Rodríguez, tutor de Bolívar y uno de los precursores de la educación popular en América Latina-. El tronco de este “árbol de las tres raíces”, a su vez impregnado de marxismo, es el pilar sobre el que se sustentó inicialmente la ideología del proceso bolivariano y el socialismo del siglo XXI en Venezuela.

En medio de semejante “tutti frutti” ideológico, el presidente Chávez afirmaba que el primer socialista de la historia de la humanidad fue Cristo, y que por lo tanto el socialismo del siglo XXI debe nutrirse de las corrientes más auténticas del cristianismo. 

Bajo el discurso del socialismo del siglo XXI, a Chávez le siguieron Evo Morales en Bolivia (enero del 2006) y Rafael Correa en Ecuador (enero del 2007).

Pero más allá del debate filosófico sobre la religión, hay varios elementos que marcan la diferencia entre el socialismo del siglo XXI y las diversas alternativas revolucionarias que se han ido construyendo a lo largo de la historia.

Remontándonos al pasado

Tras la muerte de Friedrich Engels (1895), el alemán Eduard Bernstein, considerado como el padre del revisionismo y uno de los fundadores de la socialdemocracia, plantearía entre otras cuestiones que el socialismo no se construiría como consecuencia de la toma del poder por parte de fuerzas revolucionarias, sino fruto de la acumulación de pequeños cambios producidos por la acción social dentro de los límites establecidos por las necesidades mismas del desarrollo económico. Bernstein entendía como fundamental combinar y armonizar las ventajas de una economía capitalista, prestando especial atención a las fuerzas productivas que el capitalismo genera, sin cuestionar la propiedad privada de los medios de producción, aunque sí contemplando una necesaria regulación estatal del mercado y la economía.

Si observamos las políticas propugnadas por los llamados gobiernos “revolucionarios” de Venezuela, Bolivia o Ecuador, podremos comprobar que en ningún momento dichos gobiernos han cuestionado al capitalismo, sino más bien se ha procedido a mejorar las condiciones económicas de los sectores más debilitados a través de fuertes programas asistenciales e incrementos salariales superiores a los desarrollados en la época neoliberal. 

De igual manera, tras el neoliberalismo que dejó al Estado reducido a su mínima expresión, los gobiernos del socialismo del siglo XXI reconstruyeron dicho Estado,  incrementando notablemente su intervención sobre el mercado y convirtiéndolo en eje motor de sus respectivas economías nacionales. 

El presidente Correa resumía muy bien esta cuestión en referencia a su gestión: “básicamente estamos haciendo mejor las cosas con el mismo modelo de acumulación, antes que cambiarlo, porque no es nuestro deseo perjudicar a los ricos, pero sí es nuestra intención tener una sociedad más justa y equitativa” (El Telégrafo, 15/01/12).

Para Bernstein, las instituciones políticas creadas por el liberalismo eran un avance fundamental de la humanidad y los socialistas lo que debían hacer era mejorar dichas instituciones en lugar de cuestionarlas. El viejo socialdemócrata consideraba fundamental la permanencia del sistema parlamentario de representación, lo que en la práctica significó en Europa la imposibilidad de desarrollar políticas dirigidas a la consagración de la democracia participativa, radical y directa, hoy tan demandada por los movimientos contestatarios a la crisis actual.

A ese respecto, los gobiernos del llamado socialismo del siglo XXI –especialmente Bolivia y Ecuador- no han buscado fortalecer los niveles de autonomía, organización y participación de la sociedad en la toma de decisiones, como tampoco han desarrollado políticas de resignificación social de sus instituciones. En lugar de eso, estos gobiernos se han caracterizado por intentar controlar a través de políticas clientelares a las organizaciones sociales, anulando su anterior capacidad de movilización –por considerarla un factor de desestabilización política- y criminalizando la protesta social.

En contraposición, basta ver cómo el partido de gobierno en Ecuador procesa como metodología de selección para sus candidatos a legisladores ante el próximo comicio electoral, un mecanismo que combina la popularidad con los niveles de lealtad hacia su líder, ignorando procesos democráticos internos que pudieran contemplar mecanismos de primarias u otros por los cuales participe el conjunto de la sociedad.

De igual manera, la búsqueda del estado del bienestar por la socialdemocracia europea es confundida por los gobiernos del socialismo del siglo XXI con los objetivos plasmados en las Constituciones de Bolivia y Ecuador sobre la búsqueda del Buen Vivir (suma qamaña en Bolivia o sumak kawsay en Ecuador), ignorando así que el concepto del Buen Vivir nace en la periferia social de la periferia mundial carente de los elementos engañosos del desarrollo convencional que ha conocido el mundo industrializado.

En resumen, el llamado socialismo del siglo XXI no pone en cuestión ni la economía de mercado, ni la propiedad de los bienes de producción, ni tampoco el sistema de precios, con lo cual carece de elementos nuevos que merezcan destacarse, quedando lejos de la fórmula planteada por el marxismo de Mariátegui en la cual indicaba que “tenemos que dar vida, con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje, al socialismo indoamericano”.

Es desde esos parecidos con la socialdemocracia europea desde donde se puede entender que los procesos latinoamericanos que se denominan a sí mismos como los más radicales, generen incongruencias en el ámbito del sector financiero privado como las siguientes:

En Venezuela, la Superintendencia de las instituciones del Sector Bancario (Sudeban) ha definido el pasado mes de abril a este período como “el mejor momento en su historia”, haciendo referencia a la situación actual de la banca. La Sudeban calificó con 71,67 puntos la salud de su sistema bancario, aplicando el método internacional de evaluación Camel, el cual toma en cuenta aspectos como: suficiencia patrimonial, calidad de activos, gestión administrativa, liquidez y rentabilidad. Así, los primeros siete bancos privados en ganancias, para abril de 2012, obtuvieron unos resultados netos de 4.951 millones de bolívares. Según fuentes oficiales, en julio del 2011 la banca privada había ganado ya un  81,7% más que en el mismo período del año anterior, pasando de 498,5 millones de dólares a mediados de 2010 a 846,2 millones doce meses después, todo ello a pesar de que la economía se había contraído un 7,1%.

En Bolivia, según datos de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi) se revela que las utilidades que obtuvieron las entidades pertenecientes al sistema financiero a junio del 2011 fueron de 176,2 millones de dólares, superando en 7,88% las obtenidas por este sector durante toda la gestión 2010. Son 21 grupos corporativos, empresariales y de inversiones los propietarios de todo el sistema bancario boliviano.

En Ecuador, el crecimiento acumulado del sector bancario privado fue durante los tres primeros años de gobierno de Correa (2007-2009) un 70% superior al de los gobiernos  neoliberales anteriores en el mismo período. En 2010 el sector bancario privado alcanzó un 15,4% de utilidades más que en el ejercicio 2009, y en 2011 un 52%  más que en el ejercicio 2010, aproximándose sus utilidades a 500 millones de dólares.

Y similares incongruencias encontramos respecto al sector económico privado:

En Venezuela, el mismo presidente Chávez declaró el pasado 18 de mayo que el crecimiento del sector privado está por encima del público. Pero no solo es el sector privado el que más crece, sino que si consideramos el excedente de explotación venezolano, concepto que comprende los pagos a la propiedad (intereses, regalías y utilidades) y las remuneraciones a los empresarios, así como los pagos a la mano de obra no asalariada, veremos que este pasó de 49,02% en 1999 a 61,30% en el 2010. Es decir, los 400 mil empresarios existentes en Venezuela se llevan la mayor parte de la tarta, por encima del trozo que les corresponde a los 14 millones de trabajadores asalariados existentes (sumados trabajadores formales e informales).  Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de Venezuela y a pesar de las mejoras respecto al índice Gini en el país, tras más de una década de gobierno “revolucionario”, el 20% de los hogares con mayores ingresos económicos devenga el 45,56% del ingreso total, mientras el 40% de los hogares más pobres apenas se apropia del 15,1% del ingreso.

En Bolivia, hasta noviembre del 2011, las recaudaciones  fiscales lograban un record histórico. Según el ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce Catacora, el ingreso tributario más importante es el Impuesto a las Utilidades Empresariales (IUE), que representa el 24% del total de las recaudaciones impositivas. Dicho monto significa que prácticamente un cuarto de los ingresos de impuestos que recibe el Tesoro está generado por las utilidades proporcionadas por el sector privado. Arce se congratulaba de dicha situación indicando que “le está yendo muy bien al sector privado, porque están pagando grandes cantidades por el Impuesto a las Utilidades Empresariales. Y nos alegramos que les vaya bien a los empresarios privados, porque mientras sigan contribuyendo (…) a las recaudaciones tributarias, el país seguirá teniendo estos récords de recaudaciones impositivas”.

En Ecuador, tras más de cinco años de gobierno de la revolución ciudadana, 62 grupos económicos concentran el 41% del PIB, teniendo el sector privado un beneficio superior al 54% del que obtuvo durante los mismos períodos de gobiernos inmediatamente anteriores a Correa, los cuales eran de perfil neoliberal.

En resumen, el llamado socialismo del siglo XXI, carente como se puede ver del histórico concepto de lucha de clases, ha permitido que en sus respectivos países los sectores excluidos de la sociedad nunca estuvieran menos mal, y que sus grupos económicos poderosos nunca estuvieran mejor. Algo muy parecido al rol desarrollado en Europa por la socialdemocracia durante la segunda mitad del siglo pasado.

viernes, 19 de octubre de 2012

A propósito del 30'S



Por: María Fernanda Soliz

A casi un mes del 30’S y saturada del bombardeo mediático, inevitable me llega la pregunta: ¿de qué 30 ‘S hablamos?
Con seguridad no será del 30’S de 2009 cuando el profesor Bosco Wisum, de la nacionalidad Shuar,  murió como producto de la brutal represión que el “gobierno de la revolución ciudadana” y su política de criminalización ejercieron contra los manifestantes que rechazaban la Ley de Aguas y las concesiones mineras en Morona Santiago.
No, por supuesto que no. Las reglas de juego del correísmo no permitirían que  la retórica utilizada por el primer mandatario: “prohibido olvidar”,  aplique  a este caso. Porque la frase es nada más un slogan que desnuda de sentido a la urgencia real de construir memoria colectiva.
La memoria colectiva es a la vez homenaje y denuncia. Homenaje  a la resistencia de nuestros pueblos y denuncia de las nuevas estrategias para el despojo, el saqueo y la violencia.
Entonces, empiezo a tejer con tristezas anudadas este homenaje al joven profesor y a toda la lucha que en él se representa. Un homenaje a la sabiduría de nuestros pueblos indígenas quienes  nos enseñan que la tecnología no traerá progreso y que la vida bonita  o vida buena se construye por sobre todo respetando la soberanía de los pueblos y sus territorios.
En este hilado también aparecen los cordones de la resistencia, porque el 30’S es también denuncia colectiva. En Bosco se representan los compañeros de Dayuma: golpeados, violentados y apresados. Desde el Sur Carlos Pérez, Efraín Arpi y Federico Guzmán quienes han sido condenados por delito de Defender el Agua; los 18 comuneros de Shaglli que con coraje se negaron a ser parte del espectáculo de las consultas no vinculantes. Todos y cada uno de los indígenas y campesinos defensores del agua, la vida y la pachamama quienes se resisten a aceptar la colonialidad de las multinacionales y la traición de un gobierno cegado por el poder.
Prohibido olvidar la fortaleza, la entereza y la integridad con la que los compañeros/as de la Federación Shuar respondieron ante el chantaje burdo de Correa: “si no quieren minería, tampoco tendrían alumbrado eléctrico ni carreteras” les dijo en su habitual tono despótico-burlón. Los compañeros/as Shuar  estuvieron de acuerdo.
En palabras de Domingo Ankuash: “para nosotros la tecnología es destrucción, es muerte, acaba con la Pachamama que nos da la vida, el alimento, la alegría”.
Paradójicamente,  el 30’s también será recordado como el día de la democratización tecnológica, en lenguaje coloquial: el día en el que los celulares del Ecuador colapsaron. En este 30’S,  una vez más, quedó demostrado que la tecnología teorizada como una especie de fuerza moral que operaría creando una ética de la innovación, la producción y el resultado, solamente contribuye a la extensión planetaria de los ideales modernistas.
El concepto “transferencia de tecnología” es un  nuevo componente de los proyectos de desarrollo, y en esta línea, la revolución ciudadana nunca tomó conciencia de que la transferencia no depende simplemente de elementos técnicos sino también de factores sociales, políticos y culturales. Porque aún hoy en día, la tecnología se considera neutral e inevitablemente benéfica y no como instrumento para la creación de los órdenes o desórdenes mundiales.

lunes, 8 de octubre de 2012

Ernesto "Ché" Guevara


Ernesto Guevara de la Serna (1928-1967) Fue un revolucionario, guerrillero, político y médico comunista argentino que posteriormente se nacionalizaria argentino-cubano. Fue uno de los líderes de la revolución cubana llegando al grado de comandante y murió en Bolivia durante al guerra de guerrillas en aquel país con la intención de liberarlo.

Ernesto Guevara nació el 14 de Junio de 1928 en una familia de clase media alta. Durante su adolescencia ya empieza a mostrar ciertos puntos clave en su ideología, como el antiimperialismo y mas concretamente al imperialismo norteamericano.

En 1950 inicia su primer viaje solo y en 1952 su primer viaje latinoamericano. Finalizó sus estudios de medicina universitarios, recibiendo así, el titulo de médico.

En 1953 inició otro viaje latinoamericano llegando a Guatemala sin dinero, donde se tuvo que establecer y donde tuvo lugar poco después un golpe de estado con el apoyo de la CIA contra el gobierno democrático.

Ernesto empezó declararse comunista abiertamente y en múltiples escritos, escribía admirando la revolución, el socialismo y nombrado figuras como el camarada Stalin.
Cuando el ejército golpista invadió Guatemala, Ernesto se inscribió a las brigadas de sanidad y a las brigadas juveniles comunistas, quién patrullaban las calles por la noche. Pero en Julio de 1954, los golpistas ganan y se establece allí una dictadura militar.
Tres eso, ese mismo año, Guevara se exilia en México, donde se casa, tiene una hija, conoce a Fidel Castro e ingresa en el Movimiento del 26 de Julio (M-26-J), con el fin de derrocar al gobierno dictatorial que hay en cuba.

Entró en el grupo tras conocer a Ñico López, pero la ley de amnistía dejó libre a Fidel y Raúl Castro, como a 18 compañeros mas. Raúl llegó primero y congenio muy bien con el Ché, aunque Fidel no había estado nunca en el Partido Comunista, Raúl si lo había hecho en el partido comunista cubano llamado por aquel entonces "Partido Socialista Popular", siendo Raúl mucho mas radical en sus actitudes y posiciones.

Dos semanas después de la llegada de Fidel a México, se le ofreció al Ché la entrada en el movimiento y éste acepto sin dudarlo. Fueron entrenados en al guerra de guerrillas por un coronel español que había luchado con al república en la guerra civil española llamado Alberto Bayo Giroud (quién también participaría en la revolución cubana y llegaría a ser general en el ejército cubano).

El Ché junto con Fidel Castro

En el verano de 1954, la mayoría del movimiento es arrestado por la policía mexicana.
El Ché fue uno de los últimos en salir al considerarse comunista cuando lo interrogaron y que tenía intenciones de hacer revoluciones en América latina. Fidel Castro demoró la salida a Cuba para que el Ché pudiera acompañarlo y realizo gestiones con las autoridades mexicanas y el 2 de Diciembre, 82 hombres (Fidel y Raúl Castro, El Ché, Juan Almeida y Camilo Cienfuegos entre ellos), parten en el yate Granma hacia Cuba, para iniciar el movimiento revolucionario.

Desembarcaron en el Golfo de Guancanayabo, pero tres días después, cuando aún el grupo estaba desorganizado, fue emboscado por el ejército y la mayor parte murió en el combate, fueron ejecutados o detenidos. El resto se dispersó y volvió a reunirse en la Sierra Maestra el 21 de Diciembre, aunque el gobierno aseguro que los hermanos Castro y el Ché Guevara habían muerto, peor Ernesto envió una carta a su familia haciéndoles saber que estaba bien. La Sierra Maestra es un cordón montañoso situado a 800 km de la habana, en el otro extremo de la isla, cubierta por la selva tropical y que conecta con la ciudad de Santiago de Cuba.

Debido al clima, el Ché sufrió fueres ataques de asma, cosa que no le impidió emplear su visión táctica, su valor temerario y una gran capacidad de mando. Guevara también impuso su personalidad al mostrarse estricto en sus actos de disciplina, cosa que se vio claramente en 1957, cuando descubrieron a un guerrillero traidor que había dicho la posición del grupo al enemigo, haciéndoles perder muchos hombres y al borde de la derrota definitiva. Fidel Castro decidió que sería fusilado por traición  y como no dijo quien lo haría, ante la indecisión general, el Ché fue quién le disparo un tiro en la cabeza. Pero el Ché no era una persona fría y sanguinaria, ya que siempre se mostró tolerante con los errores de sus propios hombres y con los prisioneros enemigos, interviniendo para evitar ejecuciones, atendiendo como médico a los heridos heridos y prohibiendo estrictamente las torturas y los fusilamientos a los prisioneros.

Los primeros meses fueron tranquilos, murieron apenas 6 guerrilleros y no hubo muchos enfrentamientos. El grupo guerrillero se hizo se popular nacional e internacionalmente por una entrevista a Fidel en el Times.

En mayo el ejército revolucionario había crecido a 128 combatientes bien preparados y el día 28 atacaron el Cuartel de El Uvero, perdiendo la vida 6 guerrilleros y 14 soldados con una gran cantidad de heridos en los dos bandos, y el Ché atendió a los heridos de ambos bandos. Un tiempo después el Ché fue ascendido a capitán y pocos días después al grado de comandante, grado que hasta entonces solo tenía Fidel Castro. Ahora la gente debía de llamar a Ernesto "Comandante Ché Guevara". La segunda columna sería llamada luego cuarta para confundir al enemigo.

El Ché llamó la atención por integrar en sus tropas a guajiros y negros, que eran por aquél entonces el sector mas marginado del país. Tras unos cuantos enfrentamientos victoriosos establecería una base permanente (con hospital, panadería, armería, zapatería...). Una de las funciones que tuvo el Ché fue detectar a infiltrados en la columna y ejecutar a los bandoleros que aprovechaban la situación para para violar mujeres y asesinar, y que aparte en muchas ocasiones se identificaban como guerrilleros revolucionarios.

Fue estricto con su columna, haciendo que algunos incluso pidieran el traslado a otra, sin embargo tenía un comportamiento igualitario y justo, enseñando a gente leer y escribir, matemáticas, política entre otras cosas, hizo un grupo fuertemente solidario.

A principios de 1958, Fidel decidió formar nuevas columnas al mando de Juan Almeida, Raúl Castro y Camilo Cienfuegos, a quienes designo comandantes. Posteriormente el Ché fue retirado de la primera columna para adiestrar a los novatos.

El 6 de Mayo el ejército de Batista lanzó una ofensiva de 10.000 hombres sobre los rebeldes, que contaban con 280 guerrilleros y durante las primeras semanas de la ofensiva las fuerza de Batista estuvieron a punto de derrotar a la guerrilla que sufrió enormemente la ofensiva, sin embargo las tropas del ejército no pudieron acorralar a los guerrilleros y en Julio éstos lanzaron una ofensiva contra el ejército. Tras sucesivas victorias, Fidel Castro fue nombrado comandante en Jefe.

En Agosto las tropas de Batista inicia su retirada de la Sierra Maestra y Fidel Castro vio a Batista lo suficientemente debilitado como para expandir la guerra al resto de Cuba. El Ché Guevara y Camilo Cienfuegos debían marchar hacía el norte y dividir la isla en dos y preparar el ataque de la ciudad estratégica de Santa Clara, cosa que les abriría camino a La Habana. Los hermanos Castro se quedaron en Oriente para controlar la región y atacar Santiago de Cuba.

El Ché Guevara en una entrevista

Durante su llegada hasta Cuba occidental, el Ché conocería a la que sería su mujer: Aleida March, y con quien tendría cuatro hijos.

A finales de Noviembre las tropas del Gobierno atacaron a las tropas de Camilo y Ernesto y tras una semana de enfrentamientos, el ejército de Batista se retiró con múltiples perdidas.

La columna de Camilo se dirigió y estuvo combatiendo hasta el día 31 de Diciembre en Yaguajay, mientras el Ché tomaba Remedios y el puerto de Caibarién y el día siguiente el cuartel de Camajuaní, donde las tropas del gobierno huyeron sin combatir el 27 de Diciembre, quedando así el camino libre para atacar Santa Clara, la cual Batista había fortificado con 2.000 soldados y un tren blindado, sumando un total de 3.500 soldados para combatir a 350 guerrilleros (10 veces menores en número).

El día 28 de Septiembre comenzó el ataque, la batalla fue sangrienta y duro 3 días por toda la ciudad. Guevara estableció como prioridad era el tren blindado, que sería tomado el 30 de Diciembre, cosa que desencadenaría la caída de Batista. El dictador de huyó de Cuba pocas horas después.

Las fuerzas rebeldes triunfantes en toda la isla, procedían a detener miembros de la dictadura de Batista, muchos de los cuales fueron declarados criminales de guerra. Las tropas de Camilo se dirigieron a La Habana tomando los puntos restantes de la isla y las tropas rebeldes entraron triunfantes en la capital.

Cuando tomaron el poder se estableció un nuevo gobierno y éste empezó a tener buenas relaciones con la Unión Soviética.

Muchos de los juzgados como criminales de guerra fueron fusilados, cosa que debido a las constantes críticas, el Ché contestó diciendo: "...Fusilamientos, si, hemos fusilado, y seguiremos fusilando mientras sea necesario. Nuestra lucha es una lucha a muerte...".

El 7 de Febrero se estableció una nueva constitución, cosa que hizo que el Ché Guevara fuera nacionalizado cubano, debido a uno de sus artículos.

Por su experiencia en el pasado el Ché estaba seguro de que Estados Unidos no permitiría una reforma a escala social y económica que iba a implantar la revolución y que en un caso extremo llegaría incluso a invadir la isla. Por eso Guevara optó por establecer un gobierno socialista, excluyendo a los sectores conservadores. Pensó también en prepararse para un confrontación abierta con Estados Unidos, buscar el apoyo de la Unión Soviética (URSS) y abrir nuevos focos guerrilleros en América Latina para expandir la revolución por todos los territorios latinoamericanos. Guevara participó también en la reforma agraria.

Ché Guevara en la ONU

La situación se polarizó inmediatamente después de la caída de Batista y se activaron organizaciones militares y terroristas contra el nuevo gobierno y la preparación de la invasión de Cuba desde el exterior. Estados Unidos y varios dictadores latinoamericanos apoyaron los planes contra el gobierno revolucionario cubano. El Ché también impulsó la nacionalización de las empresas.

Una cosa que cabe destacar en el Ché es que a pesar de ser una figura importante, fue la estricta austeridad y la falta de privilegios que que insistió en extremar. Incluso cuando se hizo presidente del banco de Cuba, se negó a cobrar los 2.000 pesos correspondientes por el cargo, quedándose únicamente con su sueldo de comandante de 250 pesos.

Ernesto viajó durante dos meses por varios países comunistas: Yugoslavia, la Unión Soviética, China, Corea y Alemania Oriental. En todos estos países conoció algunos de sus dirigentes tales como Josip Broz "Tito", Mao Zedong o Nikita Jruschov, por quien fue invitado a presenciar junto a el y el resto del Soviet supremo la celebración de la Revolución Rusa.

La prioridad del Ché en ese viaje fue el acercamiento y amistad entre Cuba y la Unión Soviética.

Antes de dejar el poder en 1961, el presidente de los Estados Unidos Eisenhower, rompió relaciones diplomáticas con Cuba y el enfrentamiento abierto se veía venir.

En Abril de 1961 se produjo la invasión de Bahía Cochinos desde Nicaragua, donde un ejército de anticastristas, la mayoría cubanos exiliados, fueron armados y entrenados por la CIA para que invadieran Cuba, pero fracasa tras 72 horas totalmente vencida por el ejército cubano dirigido por Fidel Castro.

Por acuerdos con la Unión Soviética, Cuba permitió que ésta estableciera misiles en su territorio, cosas que llevaría a la crisis de los misiles de Cuba cuando un avión espía de los Estados Unidos detecto los misiles y el mundo estuvo al borde una III Guerra Mundial a escala nuclear.

El asunto acabo resolviéndose con un acuerdo por el cual los Estados Unidos no invadirían Cuba y retirarían los misiles nucleares de Turquía a cambio de que los soviéticos retirara los misiles de Cuba.

El Ché tenía un pensamiento internacionalista en el que entraba abrir nuevos focos guerrilleros en otras partes del mundo y que abrir los frentes en África, Asia y América Latina sería un fuerte golpe para el imperialismo.

El Ché en los años 60

Tras iniciar múltiples guerrillas en varios países latinoamericanos, el Ché vio una gran oportunidad en la República Democrática del Congo, en el centro de África, con fronteras con 9 países, cosa que el Ché veía como un foco para una revolución a mayor escala.
Por lo que por un tiempo, el Ché estuvo en paradero desconocido.

El Ché se presentó para combatir en el Congo sin previo aviso a los líderes rebeldes, cosa por la que fue mal recibido. Ernesto se instalaría en la zona de combate y mientras los líderes militares congoleños casi no iban al frente.

La participación cubana en la rebelión congoleña fue un desastre, el idioma, la falta de disciplina, las facciones nacionales y extranjeras y el cese del apoyo de Tanzania. El Ché se retiró del Congo considerando la situación como vergonzosa en 1965 y tres días después de que Guevara abandonara el Congo, un golpe de estado instauró una dictadura en el país.

Luego pasó 5 semanas en Praga escoltado por el servicio secreto cubano y estuvo allí preparó el próximo paso guerrillero en Bolivia con el apoyo de Fidel Castro.
En 1966 el Ché regresa secretamente a Cuba y ve por última vez a los hijos.

En 1966 Bolivia estaba gobernada por una dictadura que había derrocado al presidente y puesto fin a la revolución de 1952.

El Ché se instaló en una zona montañosa y selvática en el sudeste del país. Había 47 guerrilleros de países latinoamericanos y contó con el apoyo de varios grupo guerrilleros armados y demás.

El 11 de Marzo de 1967 Bolivia solicitó ayuda al servicio de inteligencia de los Estados Unidos.

La columna de el Ché se dividió de la otra columna guerrillera y no volverían a encontrarse tras varias complicaciones. En sucesivas escaramuzas fueron muriendo varios hombres, entre ellos algunos de confianza de el Ché. La guerrilla y sus aliados sufrieron duros golpes en estos meses. En ese momento escribió "Mensaje para los pueblos del mundo", en donde se encuentra su histórica frase: "Crear 2, 3... muchos Vietnam, es la consigna".

Criticando los crímenes estadounidenses en la guerra Vietnam y en el mundo y como el pueblo vietnamita aguantaba solo a la superpotencia y que el imperialismo utiliza la guerra como chantaje y que la respuesta de los pueblos debía ser el no temer la guerra.

También dice que Estados Unidos no permitiría una segunda Cuba y utilizarían todos sus medios como estaba haciendo en Vietnam, incluso con guerra abierta contra esos países y que el mismo tenía grandes esperanzas sobre las revoluciones en América Latina y que Estados Unidos no lo permitiría pacíficamente, llegando a matar poblaciones campesina y bombardeando ciudades (como después se comprobó que hacía en Vietnam).

Otra cosa que dijo fue que la guerra acabaría incluso con los países agresores.
El 1 de Agosto la CIA mando dos hombres mas para cazar al Ché Guevara. El día 31 atacaron la segunda columna muriendo todos menos 1, sus cuerpos fueron primeros trofeos y luego enterrados clandestinamente.

La columna del Ché se vio cerca de caer y la última anotación del Ché en su diario fue del 7 de Octubre.

El día siguiente fueron emboscados y solo sobrevivieron 5, el Ché pudo haber escapado, pero decidió evacuar a los enfermos, a los que venían en persecución directa, el Ché los consigue parar junto con la parte del grupo que se había quedado con el y cuando fue a continuar el cerco se cierra y luego de 3 horas de lucha, el Ché, herido en la pierna fue capturado y la mayoría de sus compañeros muertos y los que escaparon consiguieron escapar hacia Chile.

Al día siguientes fueron llevados a la Hilera y el presidente Barrentos mando ejecutar al Ché Guevara, con la CIA presente en el lugar. Poco antes sus compañeros Simeón Cuba y Juan Pablo Chang corrieron la misma suerte a la que estaba destinado el Ché.

Quien lo iba a fusilar estaba aturdido y el Ché le dijo "ponte firme, que solo vas a matar a un hombre". Poco después alzo su fusil y disparo varios disparo contra el Ché. Una de las personas mas grandes del siglo XX dejaba el mundo haciendo lo que deseaba, liberar a los pueblos de la opresión.

Frases Célebres:

- "¡Hasta la victoria, siempre!"
- "Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor."
- "Podrán morir las personas, pero jamás sus ideas."
- "si usted es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, somos compañeros, que es más importante."
- "Si no existe la organización, las ideas, después del impulso inicial, van perdiendo eficacia."
- "En una revolución se triunfa o se muere, si es verdadera."
- "La revolución no se lleva en la boca para vivir de ella, se lleva en el corazón para morir por ella."
- "Porque esta gran humanidad ha dicho basta y ha hechado a andar. Y su marcha, de gigantes, ya no se detendrá hasta la conquista de la verdadera independencia, por la que ya han muerto mas de una vez, inútilmente."
- "Me siento tan patriota de Latinoamérica, de cualquier país de Latinoamérica, como el que más y, en el momento en que fuera necesario, estaría dispuesto a entregar mi vida por la liberación de cualquiera de los países de Latinoamérica, sin pedirle nada a nadie, sin exigir nada, sin explotar a nadie."

martes, 2 de octubre de 2012

La violencia del Estado y el garrote del poder


Por: Tomas Rodríguez León
“…este socialismo tiene miedo de todo, incluso de la revolución…”.
Albert Camus

  La forma de legitimización y naturalización del poder  en la sociedad, es proponer e imponer   el monopolio de la condición dominadora -  controladora como fuerza interiorizada en positivo, para  hacer creíble y realista el miedo a la libertad. La convocatoria se extiende a educar  en la no libertad, aun en aquellos que creen en la  justica social.  La libertad como aspiración humana, no será nunca una necesidad para el poder y este querrá que no lo sea para la sociedad. La búsqueda  realista  pretende  que la sociedad acepte las bondades de los actos represivos, situándolos en el territorio del reino de la necesidad superada o superable,   racionalización que será  permanente como mixtificada en un futuro celestial de la libertad final. 
Fácilmente los que están (estamos) en la línea de la libertad individual y colectiva serán, seremos, candidatos a criminales, estigmatizados.  La cuestión criminal, se expresa a  tono con las dimensiones del ejercicio del poder,  los actores políticos con  menos poder serán, cuando revolucionarios, oponentes a las formas de opresión o dominio y proponentes de ejercicio de libertad y justicia. Esto es una aproximación  a la entelequia de la democracia. Los políticos sin poder pueden ser también concurrentes proponentes de formas iguales o peores de opresión económica o política, ellos aguardan su turno para la administración de la explotación, la dominación y la eliminación de la resistencia de los oprimidos.
Dirigir y organizar la represión contra la resistencia, es el rol consustancial de todo estado (Marx). El estado totalitario burgués en sus formas fascistas, construye  las garantías de la explotación económica en el marco jurídico policiaco contra los trabajadores y los oprimidos. En otro formato, a nombre de la revolución, el socialismo y la justicia otros “actores” al margen de la clase que dijeron representar,  construyeron monstruos estatales  que liquidaron la democracia de los obreros y abandonaron  indefinidamente la proclama de la  libertad. El estado tiene sus versiones extremas  en los  fascismos y los pseudo  socialismos
La sentencia es clara: Estado y política criminal son  consustanciales. Las  “políticas públicas” de la represión pueden democráticamente estar repartidas; típica conducta del estado liberal que invisibiliza la represión por efecto de una distribución atomizada de la violencia, en poderes nacionales, locales, comunitarios, familiares o personales. Pero  el estado y su idolología violenta, estarán en el escenario liberal  barnizados de un aparente manto de libertad que se rompe cuando las necesidades del sistema así lo determinen y se expresara con igual violencia
Los procesos criminales en la sociedad  en el marco de lo que hoy se denomina gobernabilidad y gobernanza, “ciudadana”, son ideología y conducta de aprendizajes que se reiteran cíclicamente hasta formar una cultura de aceptación de la violencia de  “arriba”. El poder ordena la sociedad, civil obedece y autoriza ¡vaya ciudadanía¡¡
La represión “necesaria” es atributo concedido a una casta burocrática para dirigir y organizar el sistema.[1] Cuando el eje gobernante se expresa con brutalidad, su rol pedagógico será también  instituir la violencia como modelo mental aceptable donde quien califica y organiza la violencia y su justipreciación es el sacrosanto Estado, con sus  formas jurídicas y sus formas policiales. Un estado totalitario represor no tendrá reparos para que en el pequeño estado se institucionalice la violencia, (en fin de cuentas todo principio de autoridad le es funcionalmente útil) las  imágenes intrafamiliares y comunitarias de la violencia, son recreaciones culturales de trasmisión vertical necesarias para que el ente dominador exista.
 Lo que no permitirá el poder, es que exista clarividencia de la agresión central o que se organicen  resistencias a la violencia tutorial del estado, ni siquiera en el plano teórico. Adicionalmente  castigara la violencia reactiva o paralela al poder, pues clave será, no admitir competencia en el  monopolio de la agresión. Así se explica el porqué combate contra  metropolitanos, delincuentes y revolucionarios
Un análisis menos sociológico  y más histórico  de esta violencia criminal, está a la vista en la lejana y próxima historia. En nuestro país, la masacre de del 15 de noviembre, la masacre de Aztra, la masacre del 2 y 3 de junio, la del 29 de mayo, la masacre a los insurgentes intentos guerrilleros en el pasado. Y en el presente la persecución y criminalización de la protesta social, la cárcel la Guadalupe llori, Marcelo Rivera, el encarcelamiento a jóvenes revolucionarios, la persecución a quienes piensan diferente…el crimen del estado con matices, sigue firme y brutal y no solo eso, siempre  en cada momento, se estigmatizo a los violentados con los más variados calificativos (violencia simbólica) “terroristas bolcheviques” se dijo de los obreros el 15 de noviembre, “bandas criminales” dijo Ponce Enríquez del pueblo guayaquileño martirizado, “basta de bestias” decía Febres cordero a los jóvenes alfaristas. “protestas criminales” “garroteros secuestradores…culpables…” dice Correa
El estado  violento  habla de violencia, ¡el burro habla de orejas¡¡. García Moreno, Tamayo, Arroyo del Rio, Velasco Ibarra, Febres Cordero, Correa… guardan la coherencia del lenguaje; acusan  a las víctimas de ser los criminales…y las victimas llámense obreros, maestros, revolucionarios, jóvenes o guerrilleros recibirán con escarnio en busca de imaginarios adoptables, los calificativos peores: terroristas, garroteros, secuestradores de la educación, enemigos de la salud pública etc.
Cuando la política criminal del estado  informa a todo el sistema: legislador, legal, tributario que la relación debe estar bien traducida, le queda un margen de error o desviación estándar, si no ha logrado impactar con su esquema, dos escenarios esenciales para la mistificación, estos son: los medios de  opinión, comunicación y crítica y el sistema educativo. De ahí que es curioso pero no sorprendente que gobiernos con estas aficiones totalitarias consideren como enemigos número uno a los periodistas y a los maestros. Porque son los comunicadores y los educadores, quienes debiendo ser los primeros reproductores ideológicos se pasan a constituirse en la amenaza contra el afán de dominio.
El control penal que se promueve  requiere de la instalación de un proceso de criminalización (fase ideológica). Por ello urgente tanto para el sistema o como para la oposición democrática fundamentalmente de la izquierda,  será fundamental el tema de la autenticidad. Las leyes (penales, procesal penales, represivo laborales) deberán, en la lógica del  estado totalitario, generar instancias concretas para que  actúen los adheridos al poder como operadores sociales. El momento previsto es crear guardias civiles conectados al estado para complementar el control social.
 La unidad es un buen punto de partida, para ser una unidad triunfadora. La izquierda cuenta con su historia y hasta con sus errores en corrección, tiene los elementos para advertir los riegos. Demócratas liberales conscientes de la amenaza, pueden  sumarse al colectivo de la resistencia, que por primera vez será un colectivo democrático, amplio, con liderazgo  viable de una izquierda inteligente. Buen comienzo de Alberto Acosta
 ¡Yo también soy Sol Rojo - Luluncoto ¡


[1] Concesión lograda por el bajo nivel de conciencia o por el alto nivel de mistificación